Juanita Gabriele Huete Blanco started on her path to becoming an agroecologist while spending time as a child with her grandmothers in the fields near Leon, Nicaragua.  Her motivation to study agroecology arose when she noticed the lack of environmentally responsible techniques used in conventional agriculture.

 

Last January, Juanita travelled from Leon to spend a month working with Artists for Soup in our school and family gardens in Corozo, the rural Indigenous Reservation where our organization’s work is centered. The Nicaraguan Children’s Friendship Foundation, a California based non-profit organization, financially supported this internship and continues to support Juanita’s studies. When Juanita returned to Leon and her studies in February, she took the lead in organizing six students from her university. They contribute time on Saturdays to a school garden for children with disabilities, which is supported by Artists for Soup. “The best part about being a trainee,” Juanita says, “is being able to have the freedom to learn through practicing in the field.”  Juanita enjoys working with others, developing crop plans, and testing new seed types in various environments.

 

Juanita hopes to work in the private sector for a company that shares her vision of reducing waste and inculcating environmental protection with agroecological techniques.  She believes companies can shift policies and avoid harming the environment. Juanita believes that environmental awareness can be created in the workplace.

 

Juanita Gabriele Huete Blanco comenzó su camino para convertirse en agroecóloga mientras pasaba un tiempo de niña con sus abuelas en los campos cerca de León, Nicaragua. Su motivación para estudiar agroecología surgió cuando notó la falta de técnicas ambientalmente responsables usadas en la agricultura convencional.

 

En enero pasado, Juanita viajó desde León para pasar un mes trabajando con Artists for Soup en nuestra escuela y huertos familiares en El Corozo, la Reserva Indígena rural donde se centra el trabajo de nuestra organización. La Fundación Nicaragüense de la Amistad Infantil, una organización sin fines de lucro con sede en California, financió esta pasantía y continúa apoyando los estudios de Juanita. Cuando Juanita regresó a León y sus estud

ios en febrero, tomó la iniciativa de organizar seis estudiantes de su universidad. Ellos contribuyen con su tiempo los sábados a un jardín escolar para niños con capacidades especiales, que cuenta con el respaldo de Artists for Soup. “La mejor parte de ser un aprendiz”, dice Juanita, “es poder tener la libertad de aprender a través de la práctica en el campo”. A Juanita le gusta trabajar con otros, desarrollar planes de cultivo y probar nuevos tipos de semillas en diversos entornos.

 

Juanita espera trabajar en el sector privado para una compañía que comparte su visión de reducir el desperdicio e inculcar la protección del medio ambiente con técnicas agroecológicas. Ella cree que las compañías pueden cambiar políticas y evitar dañar el medio ambiente. Juanita cree que la conciencia ambiental se puede crear en el lugar de trabajo.